Nombre comercial | Dreams of Kadath |
Fabricante | Cornell and Diehl (C&D) |
Tabacos | Dark-fired Kentucky, Katerini, Perique, Virginia, Burley, y black Cavendish |
Corte | Plug |
Presentación | Lata de dos onzas (56,6 gramos) |
Precio de venta | 12,25 dólares (11 euros) |
Este tabaco me llamó la atención por el nombre: Dreams of Kadath. Soy muy aficionado a Lovecraft y el relato del que sale su nombre es de mis favoritos.
Al abrir la lata lo primero que se percibe es un aroma muy dulce e intenso. Lo primero que me vino a la cabeza fue el brandy y, más adelante, me recordó al vino Fondillón, un vino rancio hecho con uvas pasificadas.
En cualquier caso las sensaciones van por ahí: pasas, licor, toques dulces… Permanecerán presentes durante toda la fumada, no en vano está aromatizado.
En cuanto a la presentación, en mi lata había un negro ladrillo acompañado de dos trocitos más pequeños para completar el peso. Viene algo húmedo, pero personalmente no he tenido problemas para encenderlo o mantenerlo encendido. Quema con relativa lentitud dependiendo de cómo se prepare.
Yo lo he preparado tanto cortando una lámina y desmenuzándola con las manos, con lo que tendremos unos algunos trozos grandes de hoja de tabaco, sin dificultad para ser cargadas; como cargando la lámina completa. En el segundo caso, como suele ser habitual, quemará más lento y se apagará menos.
Una vez en la fumada, se mantienen los sabores que el aroma nos adelantaba: pasas, vino, licor… Supongo que todo ello de forma dulce debido al cavendish. También se pueden notar pinceladas de canela y de vez en cuando regaliz. Personalmente no soy capaz de notar los otros tabacos excepto el perique, por el típico picorcillo en la nariz, pero no tengo yo habilidades de sumiller. Lo que sí puedo notar es que tiene una cierta evolución a lo largo de la fumada, desde sabores más pasificados hacia sabores de canela y regaliz hacia mitad; al final de la cazoleta recuerda a los bollitos de canela y pasas que venden en algunos lugares.
Deja una ceniza que, en mi caso, es algo irregular, fina y con tonos del blanco al gris oscuro, señal de que la combustión no ha sido del todo perfecta, probablemente debido a la humedad aunque, como he dicho anteriormente, no produce problemas de reencendidos ni humedades.
Entre el burley, los virginias, el perique y el dark fired kentucky el tabaco no va escaso de nicotina, así que diría que tiene una potencia media.
Como opinión final diré que el tabaco es una muy buena labor que puede gustar tanto a los amantes de los aromáticos como a los que no lo son. El aromatizado no es excesivamente potente ni empalagoso y acompaña toda la fumada. El aroma que deja en la habitación no es demasiado fuerte, hay que tener en cuenta el perique y los demás tabacos, pero el aromatizado hace que no sea desagradable.
Buena Cata!!.
Ha nacido un nuevo catador!
Es un orgullo contar con esta incorporación.
Menuda cata, si senyor. Las voy a coleccionar
Que diga esto Pep Costa evidencia el acierto de esta incorporación. Muchas gracias por participar.